A través de mi meditación diaria voy poniendo orden a
todos mis desordenes internos; los que me provoco yo mismo y los que me vienen
provocados desde el exterior, por una deficiente o mala educación, o bien por
enseñanzas o ejemplos tomados erróneamente.
Tengo siempre presente que para renovarme, debo
primero echar fuera lo viejo y llenarlo con lo nuevo. Al principio siempre
cuesta, pues para arreglar una casa vieja hay primero que ponerla patas arriba,
pero luego queda maravillosamente preciosa y perfecta
Seguro que te interesa: Mensaje
de los ANGELES para tu CRECIMIENTO PERSONAL